Embalse-de-la-Pedrera

Embalse de la Pedrera

Antecedentes

Los primeros estudios del embalse de La Pedrera comenzaron en septiembre de 1967 cuando el Centro de Estudios Hidrográficos (CEH) elaboró el Estudio geológico de viabilidad del embalse de La Pedrera en el que se deducía la viabilidad de este embalse aunque habría que resolver algunos problemas para su construcción- y la necesidad de seguir profundizando en los estudios. Se realizaron nuevas campañas de reconocimientos geológico-geotécnicos y, en el mes de Marzo de 1970, el Servicio Geológico de Obras Públicas redactó el Informe previo sobre el embalse y obra de La Pedrera, junto a Orihuela, Bigastro (Alicante). Este informe era más optimista que el anterior, manifestaba la posibilidad de construir el embalse y esperaba evaluar, de forma aproximada, el coste económico de las labores de corrección del terreno que había que realizar en la zona del estribo izquierdo y de los collados de la margen derecha.

El primer proyecto de la presa de La Pedrera se aprobó el 2 de mayo de 1973, e inmediatamente se abrió el proceso de licitación por el procedimiento de concurso subasta. Las obras comenzaron el mes de julio de 1973, y un plazo de ejecución de treinta y seis (36) meses se preveían terminar en agosto de 1976. Pero las cosas no marcharon como estaba inicialmente previsto y hubo que hacer cuatro ampliaciones sucesivas de plazo:

  • El 18 de junio de 1976 se pidió una ampliación de un año, hasta el 31 de agosto de 1977.
  • El 17 de junio de 1977 se volvió a solicitar una prórroga de otro año adicional, has-ta el 31 de agosto de 1978.
  • El 24 de noviembre de 1978, ya acabado el plazo anterior, se solicitó una amplia-ción de otro año, hasta el 31 de diciembre de 1979.
  • Por último, el 4 de diciembre de 1980 se pidió una ampliación de cuatro meses, hasta el 4 de mayo de 1981.

El proyecto aprobado en mayo de 1973 no iba a ser definitivo ya que, durante el transcurso de la construcción de la presa, fue preciso tramitar dos proyectos Modificados y un proyecto Complementario.

La recepción provisional de las obras tuvo lugar el 20 de abril de 1983, mientras que la liquidación provisional tiene fecha de un mes más tarde, es decir, el mes de mayo de 1983.
 

Foto Embalse de la Pedrera

Cuando las obras civiles estaban en avanzado estado de ejecución se puso en marcha el Proyecto 03/77. Toma del Canal del Campo de Cartagena, relativo a los equipos hidromecánicos con los que iba a estar dotada la toma de agua. Estas obras fueron adjudicadas el 20 de abril de 1978 y un plazo de ejecución hasta el 5 de enero de 1980. Las obras comenzaron el 4 de julio de 1978 y sufrieron un proceso parecido a las estrictamente civiles: tres ampliaciones de plazo sucesivas, una Modificación nº 1, tres expedientes de revisión de precios y una cuarta prórroga para la terminación hasta el 9 de agosto de 1981. Se cumplió este último pronóstico, la recepción provisional se produjo el 8 de febrero de 1983 y el Acta se aprobó el 25 de marzo de 1983.

Cuando surgió la necesidad de construir la presa de La Pedrera se estudiaron dos posi-bles lugares donde ubicarla. La elección del emplazamiento dependía de una serie de factores relacionados con la naturaleza geológico-geotécnica del sustrato, la capacidad del embalse que se creaba, las dimensiones de la presa resultante y la facilidad y economía de la construcción. La primera cerrada que se estudió era la que más capacidad de embalse originaba y se localizaba en el Arroyo Grande entre el Cabezo Gordo -margen izquierda- y el del Moro, inmediatamente aguas abajo de su confluencia con la Rambla de Alcoriza. Pero las condiciones geotécnicas del terreno descartaron este emplazamiento. La evolución geológica de la zona había creado un anticlinal de materiales margosos, que están recubiertos por arcillas procedentes de su descomposición, y pro-tegidos por estratos de rocas más blandas -caliza, conglomerados y areniscas-, que fue arrasado con el paso del tiempo hasta producir una inversión del relieve, de tal forma, que las margas del vaso están bordeadas por elevaciones de conglomerados y arenis-cas. Estos conglomerados atraviesan transversalmente a la primera cerrada que se pro-puso, por lo que su elevada permeabilidad aconsejó trasladar la presa hacia aguas abajo, en la rambla de Alcoriza en la cerrada que forman el Cerro de La Pedrera y el Cabezo del Moro que, aunque creaba un embalse de menor capacidad, esta era suficiente, se elimi-naban los problemas de permeabilidad y se acortaba la longitud de presa.

La elección de la tipología de la estructura -hormigón versus materiales sueltos- vino determinada por la inadecuación del material margoso -que pierde sus propiedades cohesivas en contacto con el agua- para soportar las cargas que le transmite una presa de hormigón. Se estudiaron tres alternativas de presa de materiales sueltos: homogénea, de escollera con núcleo central de arcilla y de escollera con pantalla de paramento. La elección definitiva recayó en una tipología de presa homogénea debido a la disponibili-dad de canteras en las inmediaciones del emplazamiento -arcillas y margas grises azula-das en el vaso- y a la inexistencia de agua en su entorno inmediato -necesaria en gran-des volúmenes para compactar la escollera-por lo que debía ser transportada desde distancias elevadas.
 

Accesos

El entorno geográfico del embalse está muy poblado, y la ciudad importante más próxima es Orihuela, de la que dista unos 8 Km; de Murcia capital está alejada unos 20 km siguiendo el itinerario de la antigua carretera nacional N-340a de Murcia a Alicante. A la presa se accede desde Murcia siguiendo la carretera que circula por la margen derecha del río Segura que conecta la capital con Beniaján, Torreagüera con desvío en la indicación del cabezo de la Plata y hacia Torremendo donde, antes de llegar a este municipio se gira a la izquierda para alcanzar el dique 3. A lo largo de este dique discurre la carretera A-333 que conduce a la presa principal, los diques 1 y 2 y a la casa de la Administración. Otra opción es continuar por Zeneta hasta Hurchillo y desde ahí desviarse hacia la derecha para llegar al dique 3.

La estación de ferrocarril más cercana es la de Orihuela, de la que dista 8 km, de la línea RENFE Cartagena–Alicante-Barcelona.
 

El emplazamiento del embalse puede verse en el siguiente mapa:


Datos Caracteristicos

Situación y rasgos geográficos del río y de la cuenca
SITUACIÓN DE LA PRESA
Provincia
Alicante
Término municipal
Orihuela
Río
Rambla de Alcoriza
Cuenca hidrográfica
Segura
DATOS DEL RÍO
Longitud total desde la cabecera de la rambla de Tenajo hasta el río Segura
6,0 km
DATOS DE LA CUENCA
Superficie de la cuenca del embalse
36,34 km²
Altitud máxima de la cuenca del embalse
300 m

Datos del embalse
Longitud de costa
31,00 km
Superficie del embalse
1272 ha
Volumen del Embalse 246,90 hm³

Datos del cuerpo de presa
CUERPO DE PRESA
Tipo
Materiales sueltos
Materiales de presa antigua
Tierras con núcleo de arcilla
Talud de aguas arriba
3,5/1 (h/v)
Talud de aguas abajo
3,0/1 (h/v)
Altura sobre el cauce
61,30 m
Cota de coronación (eje de calzada)
111,30 m
Longitud de coronación
716,00 m
Ancho de coronación
9,00 m
Volumen de total de hormigón
-
Volumen total de materiales
5.547.000 m³
ALIVIADERO
Nº de aliviadero
No tiene
Tipo de aliviadero
-
Ubicación
-
Posición respecta a la corriente
-
Situación
-
Tipo de cierre
-
Número de vanos
-
Longitud libre de cada vano
-
Longitud libre total
-
Tipo de compuerta
-

Finalidad

El embalse de La Pedrera tiene la función de regular una parte de los caudales transportados por el Canal Postrasvase de la Margen Izquierda para suministrar las demandas de regadío del Campo de Cartagena y de abastecimiento urbano de una serie de núcleos de población de su entorno territorial, gestionado a través de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla. Su escasa cuenca vertiente y sus reducidas aportaciones no habrían justificado nunca la construcción de este embalse que actúa prácticamente como un depósito regulador. Es una pieza maestra de la distribución del agua procedente del Acueducto Tajo-Segura a través del Postrasvase, por lo que prácticamente la totalidad de sus aportaciones proceden del Aprovechamiento Conjunto Tajo-Segura. Esta obra se empezó a gestar durante el I Plan de Desarrollo Económico y Social (1964-67) -inicio del anteproyecto-, aunque no fue hasta el II Plan de Desarrollo (1968-71) cuando acabó de definirse técnicamente y comenzaron las obras, bajo el ministerio de Federico Silva Muñoz.

En septiembre de 1967 ya comenzó a estudiarse el embalse de La Pedrera de forma acompasada con el Acueducto Tajo-Segura. Desde el primer momento ya se asignaba a este embalse la función de depósito regulador para la distribución interna del agua procedente del Tajo, y almacenar los volúmenes con los que se regaría el Campo de Cartagena y se abastecería a una serie de núcleos urbanos de la vega baja del Segura, en la provincia de Alicante.
 

Foto Embalse de la Pedrera

La presa principal de La Pedrera es de gravedad, planta recta, y fábrica de tierras con núcleo de arcilla. El núcleo constituye el elemento impermeable, se desarrolla desde la cimentación hasta prácticamente el nivel de coronación, y tiene unos taludes 1:1 el de aguas arriba y vertical el de aguas abajo. Desde el interior hacia el exterior, la presa está formada por el núcleo de arcilla, dos espaldones construidos con margas de la zona, una capa drenante de transición de 2 m de espesor y un manto de escollera de protección de 4 m de espesor -medido en horizontal-.

Foto Embalse de la Pedrera

La longitud en planta de la presa es de 716 m, su altura desde cimientos se eleva a 66,30 m, mientras que sobre el cauce es de 61,30 m. El volumen de tierras con los que se fabricó el cuerpo de presa asciende a 5 547 000 m³. Para cerrar el vaso del embalse fue necesario construir tres diques, dos de los cuales se emplazan en sendos collados de la margen derecha y el tercero en la izquierda.

Foto Vista del talud de la presa principal y del dique 1 desde la margen derecha Vista del talud y coronación del dique 3 desde el exterior
Vista del talud de la presa principal y del dique 1 desde la margen derecha Vista del talud y coronación del dique 3 desde el exterior

La sección tipo de la presa es trapecial con taludes de 3,5:1 el de aguas arriba y 3,0:1 el paramento de aguas abajo. La presa cimenta a la cota 45,00 -la del cauce es la 50,00- según una línea quebrada que se distribuye por las laderas de la cerrada. La cota de coronación de la presa principal es la 110,54 en la zona de estribos y 111,30 en el punto medio entre ambos. Tiene 9 m de ancho que se distribuyen en una calzada de 6,0 m para dos carriles y dos arcenes de 1,50 m cada uno.

Detalle Embalse de la Pedrera

La presa cuenta con un complejo sistema de filtros y drenes construidos en ambos es-paldones. Para limitar las presiones intersticiales durante la construcción de la presa y cuando se producen los desembalses, el espaldón de aguas arriba se construyó con cuatro drenes horizontales, de 1,20 m de espesor y compuestos por dos capas exteriores, de 30 cm de espesor, de material filtrante -arena-, y una central de material más grueso -gravas-, de 60 cm de espesor.

Por su parte, al finalizar el talud vertical del núcleo de arcilla, en su cara de aguas abajo, se ejecutó un dren chimenea vertical, que recorre prácticamente toda la altura de la pre-sa -hasta la cota 103,00- y tiene continuidad horizontal desde el nivel de la cimentación y hasta el final del espaldón de aguas abajo. Este dren chimenea está compuesto por dos capas exteriores de material filtrante -arena- de 1,50 m de espesor, que arropan a una capa interior, de 4 m de espesor, constituida por gravas. De este dren chimenea parten cuatro drenes horizontales que están formados por sólo una capa de arena de 30 cm de espesor. Por último, al nivel de cimentación se prolonga el dren chimenea con un dren horizontal que está for-mado por una capa central -de 2,37 m de espesor- de escollera, arropada por dos capas de material filtrante -de 1,19 m de espesor-, que están envueltas, a su vez, por sendas capas de arena -de 1,50 m de espesor-. En el exterior del espaldón de aguas abajo, este filtro termina en un repié de escollera que corona a la cota 55,00, es decir, en la berma inferior de la presa.

Foto Embalse de la Pedrera

Las margas que configuran el espaldón de aguas abajo están recubiertas por una capa filtrante -2 m de espesor medido en horizontal- de gravas y un manto de escollera, tam-bién de 2 m de espesor medidos en horizontal. Este espaldón presenta dos bermas hori-zontales, la inferior situada a la cota 55,00 y 5 m de anchura, mientras que la superior se ubica a la cota 88,10 y tiene 4 m de anchura.

Marco territorial y administración

Características físicas de la cuenca.

La cuenca vertiente al embalse de La Pedrera tiene una superficie de 36,34 km² y su altitud máxima es la cota 300 msnm; pertenece en su totalidad a la provincia de Alican-te, en una zona orográficamente accidentada, pero cuyas aportaciones naturales son prácticamente nulas. El embalse está situado en la rambla de Alcoriza y para materiali-zar el depósito hubo que construir además de la presa principal, tres diques de collado laterales para cerrar dos vaguadas situadas en su margen derecha -diques 1 y 2- y una tercera en su margen izquierda -dique 3-. La superficie vertiente tiene una forma neta-mente rectangular de unos 8 km en dirección perpendicular a la presa y unos 4,5 km en la paralela. Este territorio recibe una precipitación media anual de unos 275 mm.

El Nivel Máximo Normal del embalse que, dadas las características de la cuenca vertien-te no dispone de aliviadero, está limitado por la coronación de la presa -cota 110,50-, y está situado a la cota 105,00. El volumen total de embalse para el nivel máximo normal se eleva a 246,09 hm³. Por su parte, la superficie inundada para este nivel es de 1 272 ha, la longitud de costa asciende a 31 km y la longitud del embalse se remonta unos 6 km rambla arriba.


Foto Vista del embalse, presa y torre de toma desde la margen derecha
Vista del embalse, presa y torre de toma desde la margen derecha


Geología y sismología.

Geología y geotecnia del vaso.

La presa y el embalse de La Pedrera están situados en el extremo más oriental de las cordilleras Béticas. Esta zona está constituida por materiales terciarios, de edad Vindo-boniense, que fueron plegados posteriormente al final del Helveciense y durante el Tor-toniense, en pleno periodo Mioceno. Los materiales miocenos se encuentran plegados con fuertes buzamientos, que superan en algunos casos los 70º, entre los que destacan el anticlinal de Hurchillo cuyo flanco norte se hunde en la fosa del Segura. En él apare-cen en posición casi vertical las capas de areniscas y calizas.

A partir de este anticlinal se extiende un pliegue de gran radio, que afecta a los materia-les del Helveciense, en el que se encuentran los materiales del vaso y la cerrada. Una vez producido el plegamiento se inició un proceso de intensa erosión que desmanteló el techo calizo -de escasa potencia-del anticlinal y produjo la inversión del relieve al exca-var un gran cuenco en las margas grises azuladas del núcleo del anticlinal. En el piso siguiente, el Tortoniense, comenzó la sedimentación continental de conglomerados y areniscas, claramente discordantes sobre las margas azuladas.

Morfológicamente la zona del embalse puede describirse como una amplia depresión erosiva rodeada de relieves suaves que, en su mitad septentrional, se elevan algo más debido a los acusados contrastes de su litología. El gran anticlinal, cuyo núcleo está compuesto por materiales margosos del mioceno y protegidos con débiles estratos su-periores más duros (areniscas, conglomerados y calizas), fue erosionado produciendo un ancho valle o cuenco que constituye una fuerte variación del relieve. Todo el sustrato de la zona está compuesto por margas grises y azules del mioceno, que tienen una ele-vada potencia; en el vaso del embalse estas margas aparecen cubiertas por arcillas par-das y grisáceas con elevada proporción limosa de origen cuaternario; su potencia llega a ser de unos 12 m. En los relieves marginales del vaso, las aristas cumbreras están for-madas por una composición margo-caliza y areniscas que, por su mayor resistencia a la erosión, forman la divisoria. Estas cumbreras son los vestigios de la cobertura arrasada del anticlinal que proporciona suaves pendientes hacia el exterior y más fuertes hacia el interior.

La fuerte erosión que se produjo en las margas grises azuladas motivó que, en algunos casos, se produjeran deslizamientos de pequeñas escamas de calizas que, por una par-te, llegan a cabalgar a unidades más modernas del Tortoniense, tal y como ocurre en la ladera sureste del Cabezo Gordo y, por otra, se originasen algunas fallas de gravedad. También se producen algunas fallas de desgarre entre las calizas intercaladas en las margas grises azuladas, al Este y al Sureste del Cabezo del Moro. En definitiva, la presa se sitúa en la serie monoclinal que cierra el anticlinal por el Norte, mientras que el vaso se apoya sobre el núcleo anticlinal de margas grises azuladas, que son impermeables y que sólo en la zona de la cerrada, la presencia de conglomerados tortonienses, dio lugar a problemas de impermeabilidad.
 

Geología y geotecnia de la cerrada.

Para caracterizar la composición geológica de las cerradas, tanto de la presa principal como de los diques de cierre, el Servicio Geológico de Obras Públicas (SGOPU) se en-cargó, en el año 1971, de perforar veintiún (21) sondeos mecánicos de longitudes com-prendidas entre 15,5 m y 102,2 m y una longitud total de 1 128 m, que se distribuye-ron en los dos ejes, que en aquél tiempo se estaban estudiando como posibles empla-zamientos de la presa, y en los dos collados de la margen derecha. Estos sondeos se complementaron con seis perfiles de sondeos eléctricos, con un total de 72 unidades. En cada uno de los sondeos se dispuso un mogote, una boquilla de superficie y un tubo piezométrico, para medir los niveles de agua. A continuación se describen las capas y los materiales que aparecen en el entorno estudiado, tal y como figura en el informe del SGOPU de agosto de 1971.

En conjunto se estimó para el Mioceno una potencia de unos 700 m, de los que 300 m corresponden al Vindoboniense que está compuesto por margas, calizas, areniscas y pudingas. La cerrada y el vaso se encuentran íntegramente en esta formación y en ella se distinguen las capas que se indican a continuación.
 

  1. Margas gris-azuladas. La base del Vindoboniense está formada por niveles detríti-cos, que no afloran en la zona estudiada, seguida de una potente serie de margas arcillosas de color gris-azulado muy impermeables, que ocupan prácticamente todo el vaso. Su potencia es considerable, ya que en los sondeos más profundos sobre-pasaron los 100 m y no atravesaron el paquete. En superficie están fuertemente erosionadas y meteorizadas.
  2. Calizas gris-claras. Tienen una potencia de unos 5 ó 10 m y buzan 20º hacia el Nor-te. La erosión ha arrastrado los materiales suprayacentes margosos y excavado un collado en la margen derecha (Collado 2). La impermeabilidad de este tramo está garantizada porque le sigue otro de margas gris-azuladas impermeables.
  3. Margas arcillosas gris-azuladas. Son muy similares a las descritas anteriormente, por lo que el paquete calizo queda embutido entre ambas, lo que asegura su impermea-bilidad. En este tramo blando, la erosión ha profundizado bastante y ha formado otro Collado en la margen derecha en la dirección de la estratificación (Este-Oeste).
  4. Calizas de color gris claro. Coronando la serie helveciense hay un tramo de calizas margosas de 40 a 50 m de potencia, con niveles margosos y de arenisca intercala-dos, que ha resistido la erosión sólo en determinadas zonas y que está bien repre-sentado en el Cabezo Gordo. Bajo las calizas rotas aparecen las margas gris-azuladas antes descritas y sobre las que, en algún caso, se han deslizado retazos del tramo calizo, de mayor rigidez.
  5. Conglomerados y areniscas. Discordante sobre el Helveciense aparece un potente conglomerado de cantos heterométricos y de naturaleza diversa. Están mediana-mente rodados y trabados con cemento calcáreo. Hay cambios importantes en la serie con variaciones laterales e intercalaciones de arenisca. En la parte superior predominan los niveles arenosos. El espesor en los sondeos realizados varía desde 3,40 m hasta los 27,00 m. Esta formación detrítica presenta problemas de permea-bilidad y ocupa una franja bastante extensa que se extiende por la margen izquierda del Arroyo Grande y ocupa la parte alta del Cerro de la Pedrera, para terminar en la confluencia del Arroyo Grande y la Rambla de Alcoriza.
  6. Areniscas y margas. Una potente serie de margas y areniscas de grano medio, con algunos niveles de conglomeradillos, se apoya concordante sobre el tramo anterior. Aflora aguas abajo de la cerrada, tiene gran extensión y en parte están erosionados.
  7. Materiales aluviales. Finalmente, según la red de drenaje superficial, existen zonas cubiertas por materiales aluviales compuestos principalmente por cantos rodados, limos y arcillas, que, debido a la escasa pendiente del río, alcanza varias metros de potencia en la zona de la cerrada.

En cuanto a las canteras para obtener los diversos materiales para la presa de materiales sueltos, se aconsejaba que la escollera procediera de las calizas de color gris claro del helveciense, estableciendo la cantera en el Cerro Gordo para eliminar, además, la posibi-lidad de un movimiento posterior. El informe proponía también utilizar los conglomera-dos de la margen derecha que, de esta forma, aumentaría la estabilidad del estribo de-recho, y las margas arcillosas como núcleo impermeable

Sismología.

La actividad sísmica de la zona es muy elevada y tiene grado X en la escala MKS. Por ello se adoptó un coeficiente sísmico horizontal de 0,138 y de 0,069 vertical frente a los propuestos por la Instrucción de 0,1 y 0, respectivamente, para un terremoto de 500 años de periodo de retorno.
 

Situación

La presa de La Pedrera y su embalse se localizan en las hojas 913 (27-36) Orihuela, 914 (28-36) Guardamar del Segura, 934 (27-37) Murcia y 935 (28-37) Torrevieja, del Servi-cio Geográfico del Ejército, a escala 1:50 000, en su edición de 1997. La presa cierra la rambla de Alcoriza entre el Cabezo del Moro por su margen derecha y el Cerro de La Pedrera por su margen izquierda, a unos 400 m aguas arriba de su confluencia con el Arroyo Grande afluente, a su vez, del río Segura por la margen derecha. Para crear el embalse fue necesario construir, además de la presa principal situada en el propio cauce de la rambla de Alcoriza, tres diques de cierre adicionales.

Las coordenadas geográficas de la intersección del eje de la presa con el Barranco del Bosch son las siguientes:

Sistema de Referencia ETRS89. Huso= 30
X=686.400
Y=4.211.563

Las coordenadas geográficas (referidas al meridiano de Greenwich) son :

Longitud 2º 48’ 10” Oeste
Latitud 38º 01’ 85” Norte


 

Certificación ENS media
Certificación ISO 27001